Unas semanas atrás, me contactó una amiga para regalarle una sesión de fotos al bebé de su prima. Y el bebé resultó un pequeñín guapísimo. Eso si, muy despierto, no conseguimos que se durmiera ni con leche, ni con arrullos, ni con calorcito. ¡este chico no será modelo de mayor seguro! jajaja
Así que la mayoría de las fotos fueron en brazos de Papá y Mamá, y finalmente conseguimos algunas imagenes de familia muy lindas, Trabajar con bebés me ayuda a tener cada día más paciencia y aprender a adaptarme porque no hay forma de planear las sesiones. Como los bebés, cada una es diferente, las condiciones de luz y espacio son diferentes también.
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pues no se durmió el bebé pero mejor, porque está hermoso y tiene unos ojazos divinos. (bueno, eso digo yo que no soy la fotógrafa que sufrió haciendo la sesion...)
ReplyDeleteJa ja ja, bueno yo no sufro. Creo que lo sufren un poco más los papás que tienen expectativas y que quisieran poder controlar la situación.
ReplyDeleteYo llego a la sesión con mucha paciencia (que por cierto se me acaba y luego en otros momentos no tengo nada) y dejo que el bebé dicte lo que hacemos en la sesión.